METAVISIÓN – PRÁCTICA REFLEXIVA
La METAVISIÓN nos invita a ampliar el contexto desde el que vivimos una determina situación. Tal como indica la palabra se trata de buscar una visión META: más allá de.
La práctica de la Metavisión es un diálogo reflexivo para poner perspectiva, para observar una situación desde un lugar distinto, para considerar otras alternativas, para tener un punto de vista diferente y/o complementario. Es la decisión de poner la atención sobre un tema concreto para aprender desde la experiencia y seguir mejorando.
La Metavisión requiere crear un espacio de diálogo, confidencial, seguro, honesto, donde podemos tratar los dilemas, las paradojas, los temas éticos que tenemos en nuestro día a día. Tanto en el ámbito personal como en el profesional.
La práctica de la Metavisión es una manera de renovarnos, de profundizar en nuestra comprensión de cómo nos sentimos, de lo que hacemos, de lo que decimos. Es una manera de integrar los aprendizajes. Nos da una perspectiva sistémica.
¿Y cómo funciona? Pues lo que hacemos es un zoom-out, para incluir otras perspectivas, otros factores, para ampliar el contexto. La Metavisión nos lleva a profundizar en un tema y gracias a la reflexión y al pensamiento crítico podemos crear opciones válidas, ya sea para desbloquear un tema, para ampliar la información, para entender lo que está ocurriendo.
Después del zoom-out viene el zoom-in. ¿ Dónde estamos ahora con el tema que hemos tratado?
Esta práctica la podemos hacer a solas, sí, pero en general es más efectiva si lo hacemos con otra persona o en grupo. Es muy difícil que yo sola pueda ver aquellos aspectos que no están de acuerdo con mi propia imagen. Tendemos a ver aquello que está de acuerdo con nuestras creencias, con nuestra manera de estar en el mundo, en vez de tener el reto de considerar otras opiniones. La práctica de la Metavisión con otra persona o en grupo contribuye a tener más recursos, a madurar éticamente, a aceptar mejor las diferencias.
Personalmente opino que esta práctica a largo plazo nos ayuda a gestionar mejor el estrés y por lo tanto nos ayuda a mejorar nuestro bienestar. Es una manera de cuidarnos.
¿Y tu? ¿Cómo resuelves los dilemas que la vida te presenta? ¿Cómo te cuidas? ¿Cómo aprendes? ¿Cómo consolidas e integras tus aprendizajes?
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